Josep Guia i Marín es doctor en Matemáticas y en Filología por la Universidad de Valencia, de la que ha sido Vicerrector de Estatutos (1984-86), Presidente de la Junta Electoral (1986-2006) y profesor del Departamento de Álgebra (1971-2010). Ha sido profesor de la Universidad Catalana de Verano y miembro de su Patronato. Como matemático, ha publicado trabajos de Topología General en revistas especializadas. También ha escrito artículos sobre la historia y la función de la Universidad. Por su militancia política independentista, como miembro del PSAN (de 1974 a 2019), ha sido detenido, multado y procesado varias veces, antes y después de la muerte de Franco, así como amenazado y agredido por grupos fascistas.
1. Eres profesor de filología y matemáticas ¿Qué te apasiono antes? ¿La lengua o los números?
Cuando estudiaba el bachillerato elemental (de los 10 a los 14 años) y el bachillerato superior (de los 14 a los 16), entre 1957 y 1963, ya me atraían ambas materias, pero me decanté hacia "los números" y me licencié en matemáticas en 1971, me doctoré en 1974 y he trabajado como profesor en el Deparatament d’Àlgebra de la Universitat de València hasta el 2010. En la década de los 90, inicié mis investigaciones en filología, en colaboración con María Conca, y me doctoré en esta disciplina en 2008.
2. ¿Qué opinas de que hayan sectores de la política valenciana que afirmen que la lengua valenciana tiene orígenes moriscos y no catalanes?
No diré, como decía el sociolingüista Lluís Aracil, que la irracionalidad debería producir la muerte instantánea, pero sí que digo que la ignorancia supina y vocacional debería implicar la descalificación para ocupar cualquier puesto de responsabilidad pública. Estos negacionistas del hecho de que el valenciano es parte integrante de la lengua catalana son unos analfabetos de tomo y lomo. Afortunadamente, esta aberración cada día les proporciona menos rédito político. A medida que aumenta el nivel cultural general de la población, el secesionismo lingüístico pierde clientela.
3. ¿Qué representatividad tenía el PSAN en el País Valencià? Pueblos, comarcas y ciudades.
He sido militante del PSAN (Partit Socialista d’Alliberament Nacional dels Països Catalans), fundado el 1968 a partir del Front Nacional de Catalunya, desde que se inició su presencia en el País Valencià, en marzo de 1974, hasta el final. El partido fue legalizado en septiembre de 1977 y lo dimos de baja en el Registro de Partidos en enero de 2020. En los dos últimos años de la vida del dictador Franco y en los siguientes de la Reforma continuista franquista i comienzo del Régimen del 78, el PSAN tuvo una implantación creciente en muchas comarcas del País Valencià y un protagonismo de primera línea en la actividad política valenciana, de la clandestinidad a la legalidad, pero siempre con la represión a cuestas. Durante la década de los 80, el PSAN fue el principal referente político del independentismo catalán, contrario a la integración en la restauración borbónica heredera del franquismo, al tiempo que proporcionaba pleno apoyo a los Comités de Solidaritat amb els Patriotes Catalans. El hecho más notorio en el que participamos dos militantes del PSAN (Francesc Candela y yo mismo) junto a otras ocho personas, militantes de diversas organizaciones, fue la detención de los llamados «10 d’Alaquàs», en junio de 1975: entró la policía pistola en mano cuando estábamos reunidos para constituir el Consell Democràtic del País Valencià. Permanecimos en los calabozos policiales de València durante tres días, el juez nos dejó en libertad condicional bajo fianza y remitió el caso al Tribunal de Orden Público (TOP), que nos procesó «por asociación ilegal en grado de dirigentes», sin que llegáramos a juicio porqué nos incluyeron en uno de los primeros indultos juancarlistas. En agosto de 1975, sin hacer caso de la detención y del procesamiento, se constituyó el Consell Democràtic del País Valencià, como plataforma unitaria de ruptura democrática diferente de las Juntas Democráticas (municipales y provinciales) impulsadas por el PCE, que se apresuraron a constituir también una Junta Democrática del País Valenciano. En abril de 1976, las dos plataformas se fusionaron formando la Taula de Forces Polítiques i Sindicals del País Valencià. Con todo ello, el País Valencià pasó a ser un sujeto político de primer orden, al lado de las denominadas «nacionalidades históricas» de Catalunya, especialmente, de Euskadi y de Galicia.
4. ¿Cómo se puede llegar a la unidad política con la cultura y la defensa de una misma lengua? En la constitución española esta reconocida la plurinacionalidad de España...
Con la independencia. Dentro del ámbito del Estado español es imposible la supervivencia de ningún otro pueblo diferente del de matriz castellana. El imperialismo ancestral de la oligarquía española, que se contagia a amplios sectores de la población —recordemos a Marx: «la ideología dominante es la ideología de la clase dominante»—, impide cualquier otra solución.
5. ¿Qué fue la “Batalla de Valencia”? Algunos afirman que es más correcto llamarlo “La Batalla por Valencia”
Pongamos una fecha simbólica inicial: a partir del año 1962, cuando Joan Fuster publica "Nosaltes els valencians" y Raimon canta "Al vent" y se incorpora al fenómeno de masas de la Nova Cançó Catalana, el País Valencià se convirtió en una realidad cultural y política emergente, asumiendo en 2 amplias capas de la población —especialmente la juventud, universitaria o no, y los partidos políticos antifranquista — la lengua y la condición nacional catalana que le son propias. A mediados de los 70, en los pactos que dieron lugar al Régimen continuista del 78, los poderes fácticos del Estado español percibieron el riesgo que suponía, para el aparato de dominación política llamado «España», el creciente y entusiasta despertar catalanista del País Valencià.
Y decidieron combatirlo por todos los medios, auspiciando y subvencionando las agresiones fascistas del «blaverismo» (españolismo disfrazado de valencianismo), negando la unidad de la lengua catalana, reprimiendo manifestaciones obreras y populares, prohibiendo la posibilidad de federación entre autonomías (precepto constitucional especialmente dedicado contra los Països Catalans), etc. Esa es la explicación política de la denominada «batalla de València».
6. ¿Qué es Aplec del Puig y que se festeja allí cada año?
El Puig, como su nombre indica, es un montículo —y una población a sus faldas— que se encuentra a unos 20 km al norte de València. Allí tuvo lugar la batalla previa al cerco y la conquista pactada (sin destrucción ni saqueo) de la ciudad por Jaume I, en Octubre de 1238. El rey hizo erigir un monasterio dedicado a Santa María del Puig. El primer Aplec del Puig —“Aplec” significa "reunión"—, en 1915, fue a un tiempo un mix de romería y de míting, rememorando la conquista cristiana y la presencia catalana, reivindicando la reconstrucción del monasterio y la lengua y la cultura propia. Durante el franquismo, en la toma de conciencia de los años 60 antes mencionada, se iniciaron los «Aplecs de la Joventut del País Valencià» (Llíria 1960, Alcoi 1961, Castelló 1962), con un carácter cultural y político democrático, de izquierdas, catalanista...
El de Bocairent (1963) fue impedido por la Guardia Civil, que ocupó la población y bloqueó los accesos. Se reanudaron los Aplecs en la Vall d’Uixò (1965) i en El Puig (1966, 1967) —concretamente, en lo alto del montículo del Puig—, pero el de 1968 ya no se pudo realizar por el nuevo bloqueo de los accesos por parte de la Guardia Civil. En 1977 se recupera el Aplec del Puig, concentrándose 8.000 personas en la esplanada contigua al monasterio. En 1978, 1979 y 1980, en plena «batalla de València», se convoca el Aplec en la plaza de toros de la ciudad. Desde 1981 hasta 2014, el PSAN se hace cargo de la convocatoria y organización del Aplec del Puig, con una significación de izquierdas, catalanista y independentista, pero siempre abierta a la participación de diversas opciones reivindicativas de signo progresista.
7. ¿Cómo se enfrentaba el PSAN contra las acciones violentas del GAV y otros grupos armados fascistas? Hubo bombas contra Joan Fuster, en un recital en el estadio del Levante, contra la librería Tres i Quatre, en l’Aplec de la plaza de toros de València, etc.
El PSAN se defendió de las agresiones y se ganó un respeto frente a los fascistas. Nunca consentimos que nuestros actos fueran interferidos por la «pesta blava». Incluso pusimos en circulación un eslogan para definir esta actitud de autodefensa y dignidad: «Cap agressió sens resposta» ("Ninguna agresión sin respuesta"). Un eslogan que, posteriormente, ha hecho fortuna entre el movimiento feminista, contra las agresiones y los crímenes machistas. Y así debería ser, entonces y siempre. En lo referente a las bombas, es suficiente constatar que nunca fueron ni investigados ni detenidos ni procesados ni juzgados ni condenados los fascistas que las pusieron.
8. ¿El PSAN era marxista leninista o era más amplio?
El PSAN se definió como partido comunista en 1976, adoptando un logotipo en donde figuran la senyera estelada (la estrella y las cuatro barras rojas), la hoz y el martillo y las siglas. Como organización éramos un partido leninista, con centralismo democrático, pero sin secretario general, 3 sin designaciones a dedo, con un Comité Ejecutivo de dirección colegiada, elegido por el Comité Central, a su vez elegido por las células y los frentes de lucha (feminista, sindical, de barrios, ecologista, de enseñantes, de estudiantes, cultural, etc). Nuestro marxismo es el que se conoce como «marxismo de liberación nacional», que propugna, en una situación de opresión/ocupación nacional, que la primera contradicción a resolver es precisamente ésta. Por ello, como marxistas y patriotas, siempre hemos considerado que la independencia nacional es la prioridad. Y así debe ser, en una nación oprimida y ocupada por los estados (antes aristocráticos, ahora burgueses) español y francés. Como organizaciones más amplias y plurales ideológicamente, pero siempre defendiendo los intereses del pueblo trabajador, el PSAN impulsó el Moviment de Defensa de la Terra, en la década de los 80, i Catalunya Lliure, en la década de los 90, como embriones de un Frente de Liberación Nacional, cuya necesidad se ha evidenciado, en el caso catalán, a partir del proceso de masas independentista e ideológicamente plural, iniciado alrededor del 2010. La Assemblea Nacional Catalana y el Consell de la República también los percibo como precursores del necesario Front d’Alliberament Nacional.
9. ¿Quién fue Xavier Romeu?
Xavier Romeu (1941-1983) fue un escritor, lingüista, profesor, autor teatral y militante independentista, miembro del Comité Ejecutivo del PSAN. Murió en un desgraciado accidente de automóvil. Ya era entonces, y aún lo hubiera sido más, uno de los principales dirigentes de la lucha de liberación nacional y social del pueblo catalán. Maria Conca y yo hemos publicado en su memoria el libro "A trenc del seu nom. Vida, obra i lluita de Xavier Romeu" (Edicions El Jonc, 2018).
10. Eres autor del libro “Valencia, 750 anys de nació catalana” ¿Qué te motivo a sacar este libro adelante?
La principal razón fue, siguiendo un consejo/encargo de Joan Fuster, realizar una recopilación de la documentación que, a lo largo de la historia, avala la catalanidad, es decir, la condición nacional catalana, de los valencianos. Recibió el premio de ensayo en los Premis Octubre 1988, que organiza la editorial Tres i Quatre de València.
11. ¿Qué era el “moviment coral” y por que su aproximación al republicanismo?
Ahora te refieres a otro libro que escribí como miembro de la Junta Directiva de la Societat Coral el Micalet: "Els inicis del cant coral al País Valencià. L’Orfeó Valencià el Micalet (1893-1905)" (Universitat de València, 2019). En él se describe, combinando textos introductorios, recortes de prensa de la época e imágenes relacionadas, el nacimiento de las agrupaciones corales valencianas, que eran mayoritariamente de extracción obrera y de ideología republicana y que se formaron gracias al impulso y el ejemplo de las asociaciones corales del Principado de Catalunya, especialmente de los Coros de Clavé.
Que continua diciendo: «...a tots alcança» y que concuerda, en su acepción meteorológica, con otros refranes específicos del País Valencià como «De ponent, ni vent ni gent». La frase hace referencia específica a la batalla de Almansa (25 de abril de 1707), cuando vencieron las tropas borbónicas franco-españolas y se inició la invasión del País Valencià, la quema de Xàtiva, la caída de València y el rey Felipe V (de infausta memoria, como todos los Borbones) promulgó el Decreto de Nueva Planta que anulaba fueros, lengua e instituciones propias, pasando todo a regirse según las leyes, la lengua y los funcionarios de Castilla. La retirada frente a la ocupación borbónica continuó hacia el norte, con muchísimos valencianos refugiados en Barcelona, defendiendo la ciudad hasta que cayó el 11 de septiembre de 1714, además de todos los que pudieron exiliarse a Austria. La represión fue feroz, como la que se repitió dos siglos después, a partir de la ocupación franquista de 1939.