1. ¿De donde nace el día del orgullo?
El día del Orgullo surge de las revueltas ocurridas en Stonewall Inn, ubicado en el Village de Nueva York. A pesar de los esfuerzos de los sectores burgueses para camuflarlo, lo cierto es que estas revueltas tienen un profundo origen obrero. Además, la mayoría de las personas que se enfrentaron a la policía eran transexuales, no eran blancas y lo más importante: eran seres proletarizados en extremo. Sylvia Rivera y Marsha P Johnson lideraron las revueltas de aquella noche. Los disturbios duraron días, y lograron encerrar a la policía durante casi una hora.
Sylvia Rivera y Marsha P Johnson |
Éste es el origen del Día del
Orgullo Gay, el cual ha sido completamente asimilado por la
burguesía, especialmente la blanca. Considero vergonzoso que el
colectivo transexual sea el más marginado dentro del colectivo LGTBI,
cuando ha sido el más combativo de todos, y al que más le debemos.
Nos
sacaron del bar y nos colocaron contra las furgonetas policiales. Los
maderos nos hicieron ponernos contra las rejas y las vallas. La gente
comenzó a lanzar monedas de un centavo, cinco y un cuarto de dólar
a los polis.
Me
gustaría citar varios fragmentos del libro Acción
Travesti Callejera Revolucionaria. Supervivencia, revuelta y lucha
trans antagonista, una recopilación de
entrevistas y discursos de Marsha y Sylvia.
<<En 1969, la noche de la revuelta de Stonewall era una
noche cálida y húmeda.
Estábamos
en el [bar] Stonewall y las luces se encendieron. Todas dejamos de
bailar. La policía apareció. Habían recibido el soborno a inicios
de esa semana. Pero el inspector Pine irrumpió – él y su brigada
de la decencia- para derrochar más dinero del gobierno.
revueltas en Stonewall Inn |
Seguidamente
comenzaron a llover botellas. Y finalmente conseguimos que la brigada
de la decencia tuviera que atrincherarse en el del Stonewall, pues
estaba realmente asustada de nosotras en ese momento. No imaginamos
que íbamos a reaccionar de esa forma.
Ya no
lográbamos sacar nada de esos mierdas. Habíamos hecho tanto por
otros movimientos sociales. Era el momento.
Había
gente gay de la calle que habitaba el Village frente al bar. Gente
sin hogar que vivía en el parque de Sheridan Square, situada al
exterior del bar, y drag queens tras ellos y todas detrás de
nosotras. La línea telefónica del Stonewall Inn estaba cortada y se
les habían quitado las luces.
Un
periodista del Village Voice estuvo todo el tiempo en el bar. Según
escribió en el Village Voice, el Inspector Pine le puso una pistola
en la mano y dijo, “tendremos que luchar a nuestra manera para
salir de aquí”
Esto
ocurrió después de que se lanzase un cóctel molotov contra el bar
y mientras embestíamos un parquímetro arrancado contra la puerta.
Finalmente
aparecieron los antidisturbios tras 45 minutos. Mucha gente olvida
que durante 45 minutos les tuvimos atrapados esa noche. (…)
Sylvia
Rivera pertenecía a los Young Lords. Tanto Marsha como Sylvia tenían
relación con los Black Panthers. De hecho, Huey Newton, co-fundador
del Black Panther Party,
aseguraba que eran parte de la revolución. Él también defendía al
colectivo LGTB, y dio un discurso en 1970, donde defendió la
homosexualidad públicamente.
Ambas
eran muy respetadas y apreciadas en los movimientos revolucionarios.
Marsha decía: “levantar el fusil,
empezar una revolución si es necesario”.
Me alegro
de haber participado en la revuelta de Stonewall. Recuerdo que cuando
alguien arrojó un cóctel molotov, pensé “Dios mío, la
revolución está aquí. ¡La revolución está por fin aquí!”
Siempre pensé que tendríamos que contraatacar. Supe que
contraatacaríamos. Lo que no sé es si será esta noche.>>
2.¿En el estado español existe homofobia?
Sí, por supuesto. A pesar de que España es considerado el país más
“gay friendly” de Europa, las agresiones al colectivo LGTB son el
pan de cada día. Solo en Madrid hubo 239 denuncias por agresiones en
2016. Y tampoco podemos olvidarnos de HazteOir, quienes consideran
que la ideología de género pervierte a nuestra sociedad, y se
dedicaron a viajar por todo el Estado portando lemas transfobos en un
autobús. La homofobia es una lacra a combatir en el mundo entero, y
España no iba a ser una excepción.
3. ¿Los comunistas están en contra de la libertad sexual y la
homosexualidad?
Los y las comunistas desean liberar a toda la humanidad, a todos los
colectivos oprimidos, y eso incluye, por supuesto, al colectivo LGTB.
Que existan aún elementos reaccionarios en nuestras filas es un
problema que debemos solucionar, pero no es un problema único del
movimiento comunista.
4. ¿Cómo es que existen comunistas que mantienen posiciones homófobas?
Existen personas y organizaciones que no son capaces de realizar una
labor de crítica y autocrítica como es debido. Buen ejemplo de ello
es el tratamiento que dieron al matrimonio igualitario en Grecia,
totalmente vergonzoso. Según los griegos, el matrimonio homosexual
confunde a los niños. Como podemos comprobar estos comentarios no
distan demasiado de las declaraciones del clero o cualquier otro
elemento reaccionario.
5. ¿LGTBI y otros colectivos cercanos están financiados por CIA y
Soros?
6. ¿El MCE esta siendo cercano y flexible sobre la LGTBI?
7. ¿Y la izquierda en general?
Si por izquierda te refieres a la socialdemocracia y demás elementos, su línea es la de siempre: reformismo, interclasismo y conciliación. Sylvia Rivera criticó a ellos elementos conciliadores del movimiento en su día, y fue señalada y agredida por ello. Los elementos burgueses y pequeño burgueses no desean combatir al capital, no buscan la destrucción del mismo, simplemente desean acomodarse en él. Eso es lo que diferencia a un movimiento reformista de uno revolucionario.
8. Se dice que estos colectivos solo quieren deformar la identidad
humana añadiendo mil géneros ¿En que se basa esta acusación?
Hablar sobre identidad humana como algo dado o abstracto es tan
estúpido como hablar de “naturaleza humana”. No existe nada
dado, y el género es una construcción social que depende de unos
valores particulares. Esta acusación se basa en la teoría del
género no-binario, el cual considera que existen géneros más allá
de los establecidos por el patriarcado. Es cierto que ciertas
culturas consideraban o consideran que existen más de dos géneros,
como en India o ciertas tribus nativoamericanas. Pero eso no quiere
decir que crear un género particular para cada persona sea la
solución. Incluso aquellos/as que dicen no pertenecer a ningún
género, acaban, obviamente, representando lo mismo que rechazan.
Esto ocurre porque los roles de género no se invierten creando
nuevos géneros y creyendo que el problema se ha resuelto de la noche
a la mañana. Esta es una posición completamente idealista.Todo valor, sea de la naturaleza que fuere, parte de una ideología dominante que nos es inculcada a cincel cada día de nuestra vida, desde que somos niños, y no desaparece porque nosotros creamos, inocentemente, que simplemente dejamos de creer en él, y que somos personas nuevas una vez descubierto el problema. Personalmente, considero que el género es una construcción social, y que es una cárcel. La única manera de abordar el problema es destruir el género como tal, y que los individuos no crezcan asimilando roles establecidos. Es la única manera de garantizar el libre desarrollo de la personalidad, y que la salud mental de millones de personas no se malogre. La única razón por la que el género sigue existiendo, es que el capitalismo necesita del patriarcado para susbsistir.
9. También se acusa que el movimiento LGTBI quiere destruir la familia ¿Qu hay de veraz en esa acusación?
10. ¿Existen colectivos comunistas de LGTBI o cercanos a este?
Existen partidos comunistas que defienden el LGTBI y colectivos centrados en la lucha y crítica de estos. El estado español esta
repleto de organizaciones y colectivos pequeños que defienden líneas correctas, pero por desgracia no llegan a trascender. Llego a
existir, sin embargo, una iniciativa marxista contra la homofobia en
su día, de la cual no he vuelto a saber nada.
11. ¿Por que el LGTBI esta lleno de empresas que se han apoderado de el e incluso lo llevan a los cuerpos represivos del estado? ¿En que situación se encuentra un/a comunista cercana a este colectivo y que como militante haya tenido que enfrentarse directa o inderectamente contra estas empresas y cuerpos?
El capitalismo, en su fase más madura y desarrollada, depende plenamente del ejército. Y si aceptar a personas del colectivo LGTBI supone engrosar sus filas, su orientación sexual deja de ser un problema. ¿Importa que tal alto cargo prefiera acostarse con hombres si es capaz de apretar el botón que borra del mapa a los molestos palestinos? ¿Resulta problemático que una mujer lesbiana forme parte del ejército si es capaz de acatar órdenes, incluso si eso supone asesinar a homosexuales en Yemen? El pragmatismo supera todos los prejuicios e inconvenientes.
Que el estado sionista de Israel se muestre como adalid de los derechos del colectivo LGTBI es cuanto menos, retorcido y siniestro. Pero ya hemos podido comprobar que el capitalismo es capaz de nutrirse de sus propias contradicciones si estas no resultan antagónicas, y que a largo plazo, resultan enriquecedoras. Para Israel el festival y el jolgorio de la diversidad supone la oportunidad de lavar su cara ante la comunidad internacional. Su expansionismo y sus políticas asesinas sobre el pueblo palestino no pueden esconderse, contamos con infinito contenido escrito tanto audiovisual que demuestran la carnicería sionista. Pero si permitir algún desfile que otro, alguna fiesta que además atraiga a turistas europeos y estadounidenses, hace olvidar el baño de sangre al otro lado del muro… quizá el colectivo no resulte tan molesto.
La diversidad ha resultado, para el capitalismo, un lucrativo negocio en el sentido más amplio del término. No sólo genera amplios beneficios mediante la creación o ampliación de los mercados existentes, especialmente el turístico, sino que además atomiza a la sociedad en grupos hostiles entre sí. La parcialización de las luchas resulta un verdadero problema para la lucha revolucionaria, puesto se niega la posibilidad de unión y un objetivo en común. Es por esta razón que debemos hacer hincapié siempre en la misma cuestión: la cuestión de clase abarca todos los aspectos de la sociedad.
12. ¿Cómo se analizan las relaciones afectivas desde la perspectiva marxista?
El marxismo, como sabemos, es una cosmovisión que analiza todos los fenómenos materiales de la vida y la sociedad. El materialismo dialéctico señala que todo tiene una base material y estructural, una condición y un contexto, y que toda cuestión ha de comprenderse y analizarse teniendo en cuenta el sistema del orden de cosas dado. A diferencia de los análisis idealistas que dan por hecho que las cosas existen sin una base que les de una razón de ser, y que la realidad se basa en abstracciones y en términos vacíos. Es decir, consideran que la realidad es neutra, y se valen de términos vagos como libertad o democracia, sin hacerse la pregunta más relevante: ¿Libertad, para qué y para quién? ¿Es libre alguien de explotar a otro para lucrarse? Este tipo de preguntas son muy importantes porque nos permiten llegar a la raíz de todo lo que analicemos, bien sean las relaciones afectivas, la libertad, la ciencia, la filosofía, los conflictos bélicos, la historia, la literatura etc.
El capitalismo tiende a mercantilizarlo todo, y tal es así que nada escapa a sus tentáculos. Todo lo existente está bajo su dominio, su ideología hegemónica. Y las relaciones afectivo sexuales no iban a serlo menos. Puesto que todas las personas de esta sociedad son criadas bajo este esquema, es inevitable que reproduzcan dicha ideología, independientemente de su orientación sexual. Se glorifica el amor tóxico, se romantizan los celos y se fomenta la posesividad, e incluso la competitividad, como si las relaciones sexuales fueran una mera conquista, un tanto en el marcador. El sexo se ve como algo vacuo, un intercambio en el que las personas ni se ven ni se sienten, sólo se busca la liberación del lívido. Y evidentemente, no hay problema en que las personas tengan relaciones meramente sexuales, y sería puritano en extremo considerar una sociedad tal, por no decir que hipócrita. Por mucho que los elementos más reaccionarios se hayan empeñado en realizar una línea divisoria bien gruesa entre los seres humanos y el resto de animales, es innegable que seguimos siendo animales, y que tenemos instintos. Disfrutar del sexo no es reprochable, puesto que forma parte de nuestra humanidad, en un sentido individual y colectivo. El sexo no deja de ser una expresión humana como cualquier otra. Sin embargo, no podemos pretender que las relaciones humanas se basen en un mero intercambio contractual, en una entrega mercantil. El sexo puede y debe darse en un contexto de respeto y afecto, respetando el consentimiento y los deseos de cada persona implicada. El hecho de que las personas se vean como objetos de usar y tirar nos convierte en una sociedad tóxica. ¿Qué clase de convivencia puede esperarse con este tipo de dinámicas? No puede existir el amor sincero, basado en la confianza y en el respeto mientras una parte someta a la otra. No podemos esperar, ni mucho menos, que los hombres y las mujeres que conforman la clase obrera se unan para organizar la revolución en semejantes circunstancias. Cuanto menos implicada se sienta la clase trabajadora, más complicada se tornará su toma de conciencia revolucionaria, su solidaridad y militancia en una organización marxista-leninista. El alejamiento de las personas las unas de las otras, es muy provechoso No podemos pretender que existan relaciones sanas y basadas en la solidaridad, mientras exista la prostitución, y los hombres sean retratados en seres que no pueden controlar sus instintos. Tenemos la obligación de luchar por un mundo en el que, como decia Olin Wright, las personas puedan ser amables las unas a las otras.
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